La mala calidad de los servicios en el país quedó evidenciada con la pésima gestión de la crisis sanitaria que generó el COVID-19
La falta de capacidad del estado de proveer servicios públicos de calidad termina afectando la legitimidad de los partidos políticos. Durante un conversatorio del Instituto de Estudios Peruanos (IEP) se abordó el tema de la burocracia y funcionamiento del Estado. Se puso énfasis en la crisis de los partidos políticos que hay en el Perú.
Luis García, de la Universidad de Temple, señaló que: «La primera impresión que uno tiene sobre la relación entre el estado y el sistema de partidos es que esta crisis de legitimidad de los partidos que se fomenta de alguna manera va de la mano de una crisis de lo que pasa a nivel del estado».
Burócratas en el Perú
El experto señala que en el Perú los burócratas no están bajo una carrera de servicio civil. Tienen dos capitales. Los cuales son el capital profesional (tecnócratas) y el capital político (agentes políticos).
También puede leer: ¿Cómo se ejerce el poder en Latinoamérica?
El expositor Luis García pone el ejemplo de lo que sucede a nivel subnacional. Donde la ausencia de una meritocracia hace que los burócratas dependan de los alcaldes. Esto hace que ingresen individuos sin experiencia o individuos que buscan la captura del poder local. No hay calidad de funcionarios públicos.
Cabe resaltar, que la meritocracia permite la continuidad de la gestión pública sin cambios de rumbo inesperados. Garantiza que en el proceso de asignación de cargos públicos prevalezcan los méritos de los candidatos y no factores externos a su currículo, como la influencia o los contactos.
Burocracia de alto nivel
La experta María Isabel Remy del IEP señaló que en la medida en la que no hay partidos políticos hay un personal del cual los partidos que llegan al gobierno echan mano.
«Los que entran a la gestión de un gobierno que no viene de un partido articulado. Entre sí se conocen, si es que han estado dentro de esta red de profesionales de alto nivel. Pero no necesariamente se conocen con algunos operadores políticos de alto nivel que pone el nuevo presidente o ministro», dijo María Isabel Remy.
La expositora María Isabel Remy manifestó que en los gobiernos locales y regionales hay un tema de captura del poder. Hay alcaldes que toman como funcionarios a individuos sin experiencia en gestión o familiares. Muchas veces pagan favores políticos dando puestos relevantes.
Débil sistema de partidos
Eduardo Dargent, docente de la Universidad Pontificia Católica del Perú, señaló que en América Latina el Estado con mucha frecuencia los políticos y los partidos no han funcionado como un estado virtuoso y que ofrezca servicios de calidad. Han llevado más bien a un estado clientelista e ineficiente. Pone como ejemplo los casos de las camarillas mexicanas o la compartimentalización del Estado en Colombia.
Por otro lado, cabe mencionar que el clientelismo favorece la contratación de funcionarios más por su valor político que por su competencia profesional. Lo cual genera un ambiente propicio para la corrupción.
«Como estamos viendo en el Perú un problema de alguna manera con los partidos. Es interesante creo, más adelante, ver esto en comparación a otros estados. Tal vez de mayor nivel que el peruano y donde también se han debilitado los partidos», señaló Eduardo Dargent.